Una  manzana en mi vida
                Una tarde de verano, mientras  caminaba por mi barrio, me tropecé con la tapa del alcantarillado y caí rodando  por unas escaleras. Me quedé inconsciente por un par de minutos. Al recobrar el  conocimiento me di cuenta de que me encontraba tumbada en el sofá de un desván.  Al poco rato llegó una anciana con una cesta de manzanas rojas y un vasito de  agua. La mujer me ofreció una manzana bastante apetitosa, era la más grande y  roja de todas. La tomé y me la comí. La señora me dejó salir por la parte de atrás  de su casa que daba a un jardín bastante bonito. Salí a la calle principal,  pero me dio un mareo y de pronto no supe dónde me encontraba, no me acordaba de  nada. Pensé que fue a causa de esa manzana… y así era, esa manzana me cambió mi  vida por completo. 
No hay comentarios:
Publicar un comentario