una carta para ti

"Una carta para ti"

 

Aunque no aparezcan en el mismo cuento, Simba del "Rey León" y Ariel, la sirenita más famosa  de los 7 mares, son íntimos amigos desde que ambos llegaron a este mundo. La explicación a cómo surgió esta relación, es que Simba se había criado en las afueras de una salvaje pero frondosa selva que lindaba con una bonita orilla. Habían pasado su infancia jugando a las cartas, a la ajedrez, a las casitas y a al pack de 80 juegos que Ariel había recibido como regalo en su décimo cumpleaños. Solían pasar los días riéndose y cantando, cantando y riéndose sin cansarse, hasta que llegaba el atardecer. Mufasa y Tritón tenían que ir a recogerlos porque para ellos, el tiempo no pasaba. Con el tiempo, fueron afianzando más, si es que aún se podía, la amistad que les unía. Un día de tantos que pasaban juntos, Ariel notó a Simba un poco preocupado. Ya habían alcanzado la adolescencia, por lo que solían hablar de sus cosas sin problemas y con total naturalidad. Ariel pues, quiso saber qué le rondaba por la cabeza a su buen amigo:

-¿Qué te ocurre Simba?- preguntó Ariel muy interesadamente

-Nada Ariel, no te preocupes por mi- le dijo Simba con la intención de desviar el tema.

-Por favor, cuéntamelo-  insistió Ariel.

-A ver… es que… desde hace un tiempo…te veo diferente Ariel- dijo Simba mientras agachaba la cabeza.

-¡Vaya Simba!, me siento realmente alagada pero… no sé cómo decirte esto…yo no siento lo mismo. Yo debería casarme y formar una familia con alguien de mi misma especie.

Y antes de que Ariel pudiera terminar su frase, Simba la interrumpió diciendo:

-¡No Ariel!, creo que me has entendido mal… no te veo como a una futura esposa como crees, sino que te veo… frita, con un poco de cebolla, pimienta y sal.

 

 

 

 

 

 

 

 

YAZMINA HERNÁNDEZ RIVERO 2ºE

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