Monólogo.

Domingo.

Las 9 de la mañana y estoy en la acera de siempre, en la puerta de siempre y con mi chaleco de la suerte. Hoy he reflexionado sobre mi vida y me he dado cuenta que cada día, cada mañana  hago lo mismo. Estoy cansado de cada día comprar el pan y que la panadera siempre me llame Minguito a pesar de decirle cada mañana que me llame Domingo, de quedarme en esta acera y ver pasar la vida, estoy cansado. 

Estoy dejando pasar el poco tiempo de vida que me queda y lo peor es que lo estoy pasando sólo, sin compañía, aquí sentado. Muchas veces me pregunto ¿Que he hecho yo para merecer esto? ¿Estaré cansado de la vida? La verdad que ya no se ni lo que se me pasa por la cabeza lo único que tengo claro es que son las 12 del mediodía y sigo aquí sentado en la acera de siempre, en la puerta de siempre y con mi chaleco  de la suerte.

Juan Carlos Hernández Díaz.