Citopeco
Un día estaba caminando por el bosque cuando de repente vi algo moviéndose, en un arbusto me acerque y un animal muy extraño echo a correr. Yo le perseguí, vi que se escondía en un pequeño hoyo abrí mi bolso y cogí mi merienda, le puse un trozo de pan y lo coloque en la entrada de el hoyo. Me escondí detrás de un arbusto y me puse a observar si salía el pequeño animal al que había llamado citopeco. Pasaron unos minutos y vi con alegría como el citopeco comía, me fui acercando poco a poco hasta que me puse a su lado, cogí un trozo de pan me lo puse en la palma de la a mano y el comió y desde ese momento fue mi amigo .
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